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1 pimiento rojo
1 berenjena grande en cuatro trozos
1/2 cebolla roja en cuñas finas
1 tomate mediano picado
1 cucharada de perejil fresco picado
1 diente de ajo majado
3 cucharaditas de aceite de oliva virgen
1 cucharadita de vinagre de vino tinto
Precaliente el horno a 200º C y forre una bandeja con aluminio.
Corte el pimiento en cuartos y elimine las semillas y las membranas.
Dispóngalo en la bandeja con la piel hacia arriba, junto con la berenjena.
Aselos de 50 a 60 minutos o hasta que la piel del pimiento forme ampollas y la berenjena esté dorada y tierna al pincharla
con un cuchillo afilado.
Cuando estén fríos, retíreles la piel con cuidado.
Corte el pimiento en tiras largas y finas, y la berenjena en trozos grandes.
Mézclelos en un cuenco con la cebolla, el tomate, el perejil y el ajo.
Bata el aceite y el vinagre en una jarra pequeña y sazone generosamente con sal y pimienta negra molida.
Viértalo sobre la ensalada y mezcle bien.
Cubra y guarde en la nevera 1 hora antes de servir.
Este plato puede prepararse un día antes y guardarse en la nevera en un recipiente hermético.
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